Xiaomi G27i 27 Full-HD IPS 1ms 165 Hz Displayport 1.4 Negro

Razones, motivos y opiniones negativas para pensárselo... antes de comprarlo en:

1. Resolución demasiado baja para el tamaño

El Xiaomi G27i ofrece una resolución de 1920 × 1080 (Full HD) en un panel de 27″. Esto plantea varios inconvenientes:

• Con esa diagonal y esa resolución, la densidad de píxeles no es especialmente elevada, lo que significa que al sentarse relativamente cerca puede notarse una imagen menos nítida, con los píxeles o el “efecto rejilla” más visibles.

• Muchos usuarios de 27″ hoy día esperan al menos 2560 × 1440 para obtener una imagen más detallada, sobre todo si usan el monitor para lectura, trabajo de ofimática, edición o sencillamente están acostumbrados a pantallas de mayor nitidez. Uno de los análisis lo resume de este modo: “para un monitor de 27″ nos esperaríamos normalmente 1440p; aquí el Xiaomi se queda claro en 1080p”.

• En tareas de “productividad” (texto fino, múltiples ventanas, edición) esa falta de resolución extra puede suponer un pequeño “peso” en la experiencia visual que no siempre se aprecia en monitores más compactos.
  
  Por tanto: aunque la tasa de refresco es alta, el hecho de que la resolución sea “básica” supone un compromiso importante.

2. Brillo y condiciones de uso luminosas

Otro aspecto en el que se advierten limitaciones es el brillo máximo del panel:

• En varias reseñas se indica que el brillo típico es de unos ~250 nits, lo cual está en el rango aceptable, pero no es “elevado”. Esto implica que en habitaciones muy iluminadas, con mucha luz ambiente o con ventanas sin cortinas, la legibilidad puede disminuir.

• Los fabricantes suelen utilizar paneles más brillantes en monitores de gama media o alta para compensar reflejos, luz ambiente intensa, etc. En esta gama económica, se reduce ese margen.

• Si tienes la mesa de trabajo frente a una ventana o luz lateral intensa, la pantalla puede “lavarse” un poco y perder contraste visible.
  
  Así que en entornos muy luminosos o donde el control de la luz ambiental no es óptimo, el desempeño puede ser algo inferior al deseado.

3. Conectividad limitada

El apartado de puertos del G27i también recibe críticas por su carácter reducido:

• Se menciona que cuenta con un DisplayPort y un HDMI 2.0 como entradas principales, junto con un jack de auriculares. No hay múltiples entradas HDMI, ni USB-C, ni hub de puertos adicionales.

• Esa limitación implica que, si deseas conectar varios dispositivos (consola + PC + laptop, por ejemplo) sin tener que estar cambiando cables, puede ser necesario un conmutador externo.

• Asimismo, la ausencia de USB-C o salida de video moderna puede restar versatilidad futura, por ejemplo para conectar laptops recientes o monitores que aprovechan USB-C para vídeo + carga + datos.
  
  En resumen: para uso estándar puede servir, pero si tu configuración es “multidispositivo” puede no ser la opción más flexible.

4. Ajustes de ergonomía reducidos

En cuanto al soporte físico, ergonomía y posibilidades de ajuste:

• En los análisis se indica que el monitor permite inclinación, pero no siempre incluye ajustes de altura, giro (pivot) o desplazamiento horizontal. Esto es habitual en monitores de gama de entrada, pero sigue siendo un “pero”.

• Si vas a trabajar muchas horas, o si la altura de tu mesa/puesto es poco usual, la ausencia de ajuste de altura puede forzar una postura menos óptima, lo que puede derivar en molestias a medio plazo.

• Adicionalmente, el tamaño de 27″ y la profundidad del soporte requieren un espacio físico decente; en escritorios reducidos puede “sobresalir” o recortar espacio libre.
  
  Por tanto: para trabajo prolongado, parece adecuado valorar si la ergonomía que ofrece es suficiente.

5. Expectativas ajustadas para edición, diseño o tareas exigentes

Aunque es un monitor orientado al gaming básico, si tu uso va más allá de juego ocasional o multitarea ligera, hay aspectos a considerar:

• Aunque cubre un porcentaje decente de sRGB (~99 %), no está diseñado para tareas profesionales de edición de color, vídeo o diseño gráfico. Su resolución, brillo y ajuste no lo hacen atractivo para esos usos en comparación con monitores específicos para creadores.

• Los ángulos de visión, uniformidad de pantalla, calidad del panel (aunque IPS “rápido”) pueden resultar “justos” frente a opciones más premium.

• Por ejemplo, si haces edición de fotos donde la nitidez, resolución y precisión son clave, quizá sea mejor opción un monitor QHD o 4K, con mejor calibración.
  
  En definitiva: el G27i cumple bien para juego y uso general, pero no para “uso profesional” exigente.

6. Compromisos propios de precio reducido

Finalmente, como ocurre con multitud de productos de gama de entrada, muchos de los contras se deben precisamente al precio “irresistible”. Revisemos:

• Se ha señalado que la marca ha tenido que “recortar” en ciertos aspectos para conseguir un precio tan agresivo. Por ejemplo, resolución, brillo, conectividad, ajustes de ergonomía.

• Estos recortes no invalidan el producto, pero implican que “no es perfecto”. Es cuestión de “¿qué estoy dispuesto a ceder?”.

• Si lo usas como monitor de juego para 1080p, sin pretensiones de edición o múltiples dispositivos, probablemente estarás más que satisfecho. Pero si tus expectativas son más altas, puede aparecer la sensación de “podría haber sido mejor si hubiese invertido un poco más”.

Conclusión

El Xiaomi G27i es un monitor muy atractivo en relación calidad/precio: gran diagonal (27″), panel IPS rápido (1 ms), refresco alto (165 Hz), y buen acabado considerando su coste. Pero no es ideal para todos los usos, y los puntos negativos que hemos detallado pueden pesar de forma significativa dependiendo de tus requisitos.

En concreto, las principales advertencias son:

• Resolución Full HD en 27″ puede quedarse corta para muchos usuarios que buscan nitidez extra o trabajan de cerca.

• Brillo moderado y pocas entradas limitan su uso en entornos exigentes o configuraciones múltiples.

• Ergonomía básica, sin ajuste de altura/giro, lo que puede afectar si valoras confort prolongado.

• No es la mejor elección para tareas profesionales de edición o color; está más orientado a juego/uso general.

• Los recortes de coste son evidentes, lo que implica que hay que aceptar ciertas concesiones.

Si tus necesidades son jugar a buen nivel, navegar, ver vídeos y utilizarlo para tareas generales y el presupuesto es limitado, este monitor puede ser una opción excelente. Pero si tienes una configuración más exigente (1440p o 4K, varias entradas, trabajo gráfico, altura ajustable, etc.), quizá sería conveniente invertir un poco más en un modelo con especificaciones superiores.

Vamos ahora a ver la ficha técnica de este estupend@ Monitor – Xiaomi G27i 27″ Full-HD IPS 1ms 165 Hz Displayport 1.4 Negro