Samsung Galaxy Tab A9+ Wifi 64GB 4GB RAM Gris 11 WQXGA Qualcomm Android 13

Razones, motivos y opiniones negativas para pensárselo... antes de comprarlo en:

Diseño y configuración base que pueden quedarse cortos

Este modelo ofrece una pantalla de 11″, almacenamiento interno de 64 GB y 4 GB de RAM en su versión más básica. Sin embargo, al observar más de cerca, surgen varios compromisos que conviene tener en cuenta:

• Los 4 GB de RAM se han señalado como insuficientes para un uso fluido en tareas intensivas o multitarea exigente; algunos análisis mencionan que “la versión de 4 GB RAM tiene sus dificultades”.

• Los 64 GB de almacenamiento, aunque ampliables mediante tarjeta microSD, pueden resultar escasos si quieres instalar muchas apps, almacenar vídeos de alta resolución o juegos grandes: el espacio “útil” se reduce tras el sistema y las apps preinstaladas.

• Al no tratarse de la variante más avanzada (o con mayor memoria), se está partiendo con la configuración mínima del modelo; por tanto, si te gustan las “máquinas para durar” o que rindan sin restricciones, este es un punto de atención.

En resumen: la versión básica puede funcionar bien para tareas ligeras, pero si piensas trabajar más, hacer edición, juegos exigentes o conservar la tablet varios años, podrías necesitar invertir en una configuración superior o aceptar que habrá “limitaciones”.

Pantalla y calidad de visualización: buenas sensaciones, pero no tope de gama

La pantalla de 11″ del modelo cumple y es suficiente para muchas tareas, pero si se analiza críticamente, se identifican varios “peros”:

• Si bien algunos usuarios indican que la pantalla “se ve nítida para su precio”, también se advierte que no pueden compararla con los paneles OLED de gama alta o con resoluciones mucho más altas. Esto implica que para usuarios exigentes en calidad de imagen, contraste o profundidad, la experiencia puede quedarse “algo por debajo”.

• En entornos muy brillantes o con mucha luz indirecta, puede que el ajuste automático o el brillo máximo no sean tan contundentes como los modelos premium. Esto puede afectar a la comodidad al usar al aire libre.

• Aunque incluye una tasa de refresco de 90 Hz (según algunas fuentes), dicha ventaja puede perderse si la RAM o el procesador no están al nivel óptimo para mantener una experiencia ultra fluida, especialmente con apps pesadas o multitarea intensiva.

Por tanto: la pantalla cumple para el día a día, pero si lo que buscas es lo mejor en reproducción de vídeo, edición de imagen o gaming visualmente exigente, hay que moderar expectativas.

Rendimiento y limitaciones en uso exigente

El procesador (por ejemplo un Snapdragon de gama media como el 695) y la versión básica con 4 GB/64 GB implican algunas restricciones para usuarios exigentes:

• En los análisis se menciona que “la versión de 4GB RAM es algo lenta”. Esto significa que en uso prolongado, con muchas apps abiertas, multitarea seria o juegos con gráficos avanzados, podrías notar ralentizaciones o tiempos de carga mayores.

• Si bien para navegación, vídeo, lectura o apps normales funciona perfectamente, para edición de vídeo, multitarea profesional, uso intensivo o “tablet como reemplazo de portátil ligero”, quizá haya que aceptar compromisos o invertir en la versión de 8 GB de RAM.

• Además, aunque la plataforma de software (Android + One UI) es sólida, la velocidad de actualización de hardware no siempre iguala la de los modelos tope de gama, por lo que los “márgenes para futuro” pueden ser más cortos.

En consecuencia: es una tablet decente para uso generalista, pero no está diseñada para “exigirle el máximo” sin concesiones.

Funciones faltantes o “menos avanzadas” de lo que podrías esperar

Cuando un producto presenta buen valor, a menudo hay que aceptar que se prescinde de ciertas funciones “premium”. En esta tablet encontramos algunos de estos recortes:

• A diferencia de modelos de gama más alta de la marca, puede que esta versión no incluya, o no tan destacados, extras como carga ultra-rápida, materiales extremadamente premium, altavoces de muy alta gama o accesorios incluidos como lápiz o teclado.

• En la revisión se destaca que “falta un cristal de protección tipo Gorilla Glass en la pantalla” y que “no hay certificación IP para resistencia agua/polvo”. Esto dota de menos robustez ante golpes, caídas o uso al aire libre.

• A estas limitaciones hay que sumar que los modelos económicos muchas veces no incluyen cargador en la caja o lo incluyen con menor potencia, lo que puede obligar a adquirir accesorios adicionales.

• Para quienes esperaban usar esta tablet para sustituir portátil, quizá encuentren que el teclado, la suite de productividad o el software “tipo escritorio” no alcanzan las cotas de los modelos diseñados para ese fin.

Así, la experiencia será más que aceptable para tareas normales, pero para funciones “avanzadas” puede haber que hacer concesiones.

Autonomía, conectividad y futuro de uso

Otro grupo de aspectos a considerar —y que pueden jugar en contra dependiendo del uso que le des—:

• Si bien la duración de batería está bien para tareas medias, al someterla a cargas intensivas (edición, pantalla al máximo, multitarea avanzada, juegos) puede que la autonomía se reduzca de forma más acusada comparado con tablets premium.

• La conectividad WiFi es buena, pero la ausencia de versiones más avanzadas o accesorios propios de estación de trabajo puede limitar el uso “profesional”.

• El hecho de que la configuración de entrada sea “mínima” (4 GB RAM / 64 GB) reduce el margen de crecimiento para el futuro. Si planeas conservar la tablet varios años, podría quedar “corta” respecto a las exigencias que vendrán.

• Aunque el fabricante promete soporte de software durante años, los modelos de gama media suelen recibir menos años de actualizaciones comparado con modelos tope de gama, lo que puede afectar su “vida útil óptima”.

Por lo tanto: si la usas para navegación, ocio, streaming, lectura, tareas ligeras, funcionará muy bien. Pero si buscas “inversión a largo plazo” con margen de crecimiento alto, hay que tener presente que podrías alcanzar un techo antes.

Conclusión

En definitiva, el Samsung Galaxy Tab A9+ es una tablet sólida para usuarios que buscan una buena experiencia general a un precio moderado: buen tamaño de pantalla, diseño atractivo, marca reconocida, funciones suficientes para la mayoría del día a día. Pero como siempre, no es perfecta, y los principales puntos negativos que conviene aceptar antes de comprar son:

• La configuración más básica (4 GB RAM / 64 GB) puede quedarse corta para uso exigente o prolongado.

• La pantalla y el rendimiento, aunque buenos, no alcanzan lo mejor que ofrecen los modelos premium (OLED, mayor resolución, mayor fluidez).

• Faltan extras “premium” como protección avanzada, materiales de gama alta, extras alus a productividad profesional con accesorios incluidos o funciones de teclado/lápiz incluidas.

• Para futuros usos más avanzados o exigentes, el margen de “crecimiento” de esta tablet es menor que el de modelos más caros.

Por tanto: si tu uso es lectura, streaming, navegación, un poco de productividad ligera, esta tablet puede ser una excelente elección. Pero si esperas que sea “tablet definitiva” para varios años, con edición de vídeo, multitarea extrema, juegos de alto nivel, o sustituto de portátil sin compromiso, quizá debas valorar subir a un escalón superior.

Vamos ahora a ver la ficha técnica de este estupend@ Tablet – Samsung Galaxy Tab A9+ Wifi 64GB 4GB RAM Gris 11″ WQXGA Qualcomm Android 13