Samsung The Frame Pro TQ85LS03FWUXXC QLED Mini Led 4K NQ4 AI Gen3 Processor Smart TV full AI Wifi Negro

Razones, motivos y opiniones negativas para pensárselo... antes de comprarlo en:

1. Precio muy elevado y coste total de la experiencia

Este modelo se posiciona claramente en la gama premium más exclusiva, lo cual trae consigo varios “peros” importantes.

• El coste de adquisición es altísimo, tanto por la diagonal de 85″ como por el acabado “arte/lujo” del producto (diseño tipo cuadro, marco personalizable, meticulosa integración). Esto significa que la exigencia de “justificar” la compra es mayor: cuanto más pagas, más esperas.

• Además del precio del televisor en sí, conviene contemplar costes adicionales: montaje profesional (soporte, fijación en pared, ocultación de cables), posibles mejoras de sonido para acompañar tamaño de pantalla, acondicionamiento de sala (control de luz, distancia adecuada, ventilación).

• En consecuencia, la “inversión real” no es solo el precio del aparato, sino todo el ecosistema que lo rodea si se quiere una experiencia premium. Si tu uso va a ser más bien estándar (series, streaming, visitas ocasionales), puede que no amortices plenamente el coste extra frente a televisores de gama alta pero menos “lujo”.

Conclusión: Asegúrate de que realmente vas a utilizar el equipo al nivel que exige para que la inversión tenga sentido. Si tu sala, uso y expectativas están alineados, puede valer la pena; si no, quizá haya alternativas más equilibradas.

2. Instalación, espacio y entorno exigentes

Una pantalla de 85″, diseño ultra-delgado tipo “marco” y estética de arte implican condiciones de instalación que pueden no estar presentes en muchas salas domésticas.

• Necesitas una pared amplia, libre de obstáculos, con buen soporte y posibilidad de hacer una instalación limpia (ocultación de cables, suficiente ventilación posterior, altura de visión correcta). Si la pared es de menor tamaño o la habitación tiene mobiliario muy cercano, la experiencia puede sentirse menos “marco de arte” y más “pantalla grande que domina”.

• La distancia de visionado óptima para 85″ es mayor que en televisores estándar; si estás muy cerca, puedes ver píxeles, percibir la red de panel o simplemente la pantalla puede resultar demasiado inmersiva de forma incómoda.

• Por otro lado, si la sala tiene muchas ventanas, luz directa o elementos que reflejan (suelo brillante, mesas de cristal), la ubicación de la televisión tipo obra de arte puede quedar comprometida por reflejos o iluminación mal controlada. Esto es especialmente relevante en un producto que busca integrarse visualmente con el entorno.

Conclusión: Este televisor exige un entorno preparado: buena pared, espacio libre alrededor, distancia de visionado, control de iluminación. Sin ello, parte del “lujo” que promete puede perderse.

3. Rendimiento de imagen con compromisos

Aunque el modelo presume de tecnología Mini LED y panel de gama alta, las revisiones señalan varios puntos donde el rendimiento no alcanza lo que uno podría esperar de un “tope de gama”.

• Una de las críticas principales es la calidad del negro y el contraste en ambientes oscuros. Incluso con tecnología de atenuación de pantalla, algunas unidades muestran niveles de negro menos profundos que televisores OLED o Mini LED más dedicados.

• En escenas HDR muy exigentes o cuando hay mucha diferencia entre zonas brillantes y zonas oscuras, la “inmersión” puede disminuir debido al nivel de negro y al control del “halo” o blooming.

• En algunos análisis se señala que el ángulo de visión es limitado: cuando se está sentado fuera del centro ideal, la imagen puede perder brillo, color o uniformidad, lo que es más notorio aún en pantallas tan grandes.

• Además, aunque el diseño “marco” es estético, la superficie ultra-delgada puede comprometer ligeramente la amplitud del sistema de retroiluminación o la robustez del panel comparado con modelos “sobredimensionados” en grosor para rendimiento puro.

Conclusión: Si bien la imagen será muy buena en muchas condiciones, si tu uso es cine en sala dedicada, visión en ángulo, o ediciones exigentes, quizá haya otros modelos que ofrecen “más por la imagen pura” a cambio de sacrificar parte del diseño. Aquí el diseño manda más que la pureza de imagen absoluta.

4. Sonido integrado y experiencia global

Con una pantalla de 85″ que ofrece inmersión visual elevada, a veces el sistema de sonido queda como elemento débil del conjunto.

• Es habitual que televisores ultra-delgados tipo “marco” tengan altavoces integrados que, aunque de calidad, no pueden igualar la presencia sonora que exige un panel de ese tamaño (graves profundos, volumen envolvente, amplitud espacial).

• Si ves películas, conciertos, juegos o contenidos que requieren sonido envolvente, lo más probable es que necesites invertir en barra de sonido o sistema externo para que la experiencia “hogar-cine” no quede coja.

• En salas grandes, la exigencia de sonido es mayor: si solo confías en los altavoces del televisor, puedes quedarte por debajo de lo que la pantalla sugiere.

Conclusión: Considera el sonido como parte integral de la experiencia — un sistema de audio complementario casi se vuelve obligatorio para que la inversión en pantalla tenga sentido completo.

5. Uso “marco‐arte” con matices

Uno de los principales atractivos del The Frame Pro es su función de “arte en reposo” (mostrar cuadros/fotografías cuando está apagado). Pero este enfoque también conlleva concesiones.

• Las revisiones señalan que aunque el modo Arte es visualmente muy atractivo, la resolución, procesamiento de imágenes de usuarios o la luminosidad en ese modo pueden no alcanzar la perfección de una obra real iluminada. En ambientes oscuros o de ángulo lateral puede notarse que “no es real pintura”.

• Adicionalmente, para que el efecto sea convincente se necesita que la pared, iluminación, decoración, altura de montaje estén muy bien considerados: un soporte instable, cables visibles o mala iluminación pueden restar al “punto de arte”.

• Por otro lado, esta dualidad (televisor + obra de arte) implica que algunas decisiones de diseño para el “modo arte” pueden haber sido priorizadas sobre otras de rendimiento puro de TV; esto puede suponer que en el modo “televisor tradicional” haya ciertos compromisos.

Conclusión: Si tu prioridad es “televisor puro” más que “televisor que también es arte”, podrías considerar que estás pagando parte del diseño “arte” que para ti no es tan relevante.

6. Compatibilidad, conectividad y funciones adicionales

Cuando un televisor busca destacar también por diseño, a veces los “extras” técnicos tienen matices que conviene conocer.

• En algunas revisiones se destaca que la elección de entradas HDMI, objetos conectados o el panel de control pueden no estar a la altura de los modelos “gama sala cine” puros: por ejemplo número limitado de puertos HDMI 2.1, ancho de banda total, o limitaciones de ángulo de visión para ciertos formatos.

• También, aunque la marca ofrece funciones de “arte” adicionales (suscripción a tienda de arte, marcos intercambiables), dichos extras suponen coste adicional o implican suscripciones que el usuario debe asumir.

• Si bien el diseño es limpio (menos cables gracias al One Connect Box o equivalente), esa misma arquitectura puede implicar que el coste de mantenimiento, acceso a puertos o actualizaciones de firmware sea un poco más complejo o especializado.

Conclusión: Verifica qué tan bien se adapta a tu sistema de cine, consolas, PC conectado, etc. Si tu uso es intensivo de gaming competitivo, varios dispositivos simultáneos o edición, asegúrate de que las conexiones y funciones cumplen al nivel que esperas.

Conclusión general

El Samsung The Frame Pro TQ85LS03FWUXXC es un televisor muy interesante, especialmente para quienes buscan una pieza de diseño que combine con la decoración, una pantalla de gran tamaño que pueda pasar como obra de arte y un nivel de imagen muy alto. Pero no es perfecto, y los “peros” son relevantes:

• Precio elevado y coste global elevado que exige que realmente aproveches la inversión.

• Instalación exigente: espacio, montaje, distancia y condiciones de sala que pueden limitar su aprovechamiento.

• Rendimiento de imagen que, aunque muy bueno, presenta compromisos frente a televisores orientados exclusivamente al rendimiento (negros, contraste, ángulo de visión).

• Sonido integrado que probablemente requerirá mejora para que esté a la altura del tamaño de pantalla.

• Enfoque “televisor-arte” que puede restar algo de flexibilidad para entornos de cine, gaming o uso intensivo de TV puro.

• Conectividad y extras que, por diseño, pueden implicar costes adicionales o menor capacidad de expansión respecto a televisores “estándar” de alto rendimiento.

Mi resumen sería: si tu prioridad es tener un televisor que sea tan decoración como entretenimiento, que se integre como parte del salón, y estás dispuesto a asumir espacio, instalación y coste, este modelo puede ser excelente. Pero si lo que buscas es “máximo rendimiento de imagen para cine, gaming o edición” sin tantas exigencias de entorno, quizá convenga considerar una alternativa más orientada al rendimiento puro o con menor coste.

Vamos ahora a ver la ficha técnica de este estupend@ TV Neo QLED 85″ – Samsung The Frame Pro TQ85LS03FWUXXC QLED Mini Led 4K NQ4 AI Gen3 Processor Smart TV full AI Wifi Negro