Balay 3HB2010B0 Multifunción 60 cm 66 L Acero

El temporizador podría no apagar el horno automáticamente al terminar, sino solo emitir un aviso, lo que representa un fallo de seguridad.

Control muy básico (mando giratorio) que limita la precisión en tiempos y funciones frente a modelos digitales.

Solo 5 funciones de cocción; puede quedarse corto para recetas especiales (vapor, descongelar, cocción lenta prolongada, etc.).

Ausencia de función de limpieza automática (pirolítica, vapor o limpieza catalítica).

Revestimiento interior no catalítico, lo que obliga a una limpieza manual frecuente y más laboriosa.

Puerta abatible que requiere espacio hacia el frente; puede ser incómoda en cocinas pequeñas o si hay mobiliario cerca.

La apertura/comportamiento de la puerta podría permitir pérdida de calor al abrirla varias veces.

Carcasa exterior o zonas de mando podrían calentarse durante el uso, representando riesgo al tacto.

Sello de puerta / junta podrían degradarse con el tiempo, provocando fugas de calor.

La cámara interior puede tener zonas que sean difíciles de limpiar (esquinas, fondo, detrás de rejillas).

Las rejillas o bandejas incluidas suelen ser pocas (1 o 2), por lo que necesitas adquirir más para cocinar variado.

El consumo eléctrico puede ser elevado para su potencia nominal, especialmente usando funciones intensivas.

Precisión de la regulación de temperatura limitada: puede haber desviaciones entre valor elegido y temperatura real interna.

Distribución de calor desigual en algunos casos, provocando zonas que se cocinen antes que otras.

Al cocinar en varias bandejas simultáneas, los alimentos pueden influirse (vapores, olores, salpicaduras).

Precalentamiento “rápido” que en la práctica puede tardar varios minutos más de lo esperado.

El ventilador / convección podría generar ruido perceptible durante el funcionamiento.

Vibraciones leves si el horno no está perfectamente nivelado.

Peso considerable del aparato (por tamaño y estructura), que dificulta su traslado o instalación.

Dimensiones voluminosas, lo que puede hacerlo incompatible con algunos huecos de encastre en cocinas pequeñas.

Requiere ventilación adecuada detrás o arriba; si los muebles están muy pegados puede obstaculizar disipación.

Posible acumulación de grasa o residuos en ventilaciones, rejillas o zonas traseras, reduciendo eficacia con el tiempo.

Los mandos giratorios pueden deteriorarse con uso intensivo o quedarse blandos con el tiempo.

Falta de bloqueo de mandos o función de bloqueo infantil, lo que puede generar operaciones accidentales.

Falta de memoria para volver a los últimos ajustes (no “recordar” función previa).

El material del frente/puerta puede ser proclive a rayas o marcas visibles con el paso del tiempo.

Las guías o raíles para bandejas podrían no ser telescópicos o fáciles de extraer, dificultando acceso a las bandejas.

Puede no incluir iluminación interior potente para ver bien los alimentos durante la cocción.

La ventana de la puerta (si la versión la tiene) puede empañarse con vapor, reduciendo visibilidad.

Si el horno tiene mando eléctrico del temporizador, puede depender de que funcione bien ese circuito; si falla, el temporizador queda inutilizado.

En versiones blancas, el acabado puede mostrar suciedad más fácilmente y requerir limpieza frecuente.

Con el uso prolongado, las resistencias pueden degradarse o perder eficiencia.

Las modificaciones de temperatura durante la cocción pueden no responder tan rápidamente como en modelos más avanzados.

Falta de funciones inteligentes, conectividad o ajustes automáticos según peso, humedad o tipo de alimento.

En caso de avería, piezas internas o componentes podrían costar bastante o no estar disponibles inmediatamente.

La garantía podría no cubrir ciertos componentes (mandos, cristal, juntas, etc.) más allá de lo básico.

El uso intensivo de grill o combinaciones altas de calor puede provocar chispas, humo o desgaste prematuro.

Los programas de aire caliente podrían resecar alimentos delicados si no se controla bien el tiempo.

Cocción de masas húmedas (pasteles, bizcochos densos) puede requerir ajustes manuales para evitar que queden crudos en el centro.

La base del horno (fondo interior) podría calentarse demasiado y quemar alimentos en contacto directo.

Al enfriar tras uso intenso, el cambio brusco de temperatura puede afectar juntas o cristales (grietas por choque térmico).

Si abres la puerta frecuentemente durante la cocción, la temperatura interna puede fluctuar mucho y afectar resultados.

No es ideal para uso profesional continuo o cocción industrial por su diseño doméstico.

La instalación en huecos existentes debe ser muy precisa; pequeños desajustes pueden producir filtraciones o mal alineamiento.

En entornos donde haya movimientos, golpes o vibraciones, las alineaciones internas pueden perderse (raíles, cristales).

Para piezas de gran volumen (asados grandes), la capacidad puede no ser suficiente o la altura interior puede ser limitante.

Si usas recipientes particulares (alta altura), puede que nopas suficiente espacio con las bandejas.

La puerta fría es relativa: no garantiza que la puerta nunca se caliente en prolongado uso.

En entornos húmedos o mal ventilados, se puede generar condensación interna o moho si no se seca bien.

Si esperas que sustituya completamente un horno mucho más caro o de gama profesional, puede que no te ofrezca el nivel de precisión, durabilidad o prestaciones avanzadas que esos modelos sí tienen.