Cecotec Cremmaet Steam 19 bar 1300W Depósito 1.1L Molinillo cónico Plug&Play Vaporizador Depósito café 150g Negro

El depósito de agua de 1,1 L puede quedarse corto para varias preparaciones consecutivas, especialmente considerando que la máquina realiza limpiezas automáticas que consumen agua.

El depósito de granos de 150 g puede no ser suficiente para un uso intensivo; tendrás que rellenar frecuentemente.

El sistema de limpieza automática al encenderse y apagarse utiliza bastante agua, lo que implica desperdicio de agua para quien no lo use continuamente.

Los pitidos de aviso pueden resultar molestos, especialmente en ambientes silenciosos.

Algunos usuarios reportan que la máquina “pierde mucha agua” en los procesos de limpieza o calentamiento.

Calidad variable de los componentes internos: plásticos, juntas y tuberías podrían desgastarse relativamente pronto.

Dificultades de durabilidad: hay opiniones que indican que el molinillo dejó de funcionar al poco tiempo.

Ajustes de molienda, dosis e intensidad pueden necesitar calibraciones frecuentes para mantener buen café, lo que implica curva de aprendizaje.

Si no usas granos de buena calidad (por ejemplo, mezcla con torrefacto) el rendimiento y sabor se resienten significativamente.

La máquina puede vibrar o moverse al moler si no está bien asentada.

Ruido al moler: debido al molinillo integrado, el proceso puede ser ruidoso.

En algunos casos, tras varias preparaciones, el sabor puede tornarse inconsistente si los residuos no se limpian bien.

Maniobras de limpieza manual del grupo infusor o conductos pueden ser incómodas o de difícil acceso.

El vaporizador (para espumar leche) puede requerir limpiezas frecuentes; si no lo haces, se obstruye o genera residuos.

En bebidas con leche, la espuma puede no ser tan estable o cremosa como en máquinas dedicadas de gama alta.

Si haces varias bebidas con leche consecutivas, puede haber demora entre una y otra para que el sistema se recupere.

La autolimpieza intermedia puede provocar que el depósito de agua se vacíe parcialmente antes de que tú lo esperes.

Pérdida de eficiencia con el tiempo: motor, bomba o molinillo podrían desgastarse y rendir menos.

Si no se descalcifica con regularidad, la acumulación de cal puede obstruir conductos y perjudicar el sabor.

En zonas con agua dura, necesita filtros o descalcificadores frecuentes para evitar averías.

Posible obstrucción de boquillas o conductos por aceites de café o residuos si no limpias frecuentemente.

El coste de mantenimiento (filtros, repuestos) puede ser elevado con el tiempo si dependes de piezas originales.

Si el sistema automático de limpieza/drenaje falla, podría haber fugas o filtraciones de agua interna.

Durante los procesos de auto lavado, puede generarse ruido adicional o goteos inesperados.

El panel de control o botones pueden desgastarse con el uso frecuente (toques constantes).

La interfaz de usuario puede no ser intuitiva al principio, lo que obliga a consultar manual frecuentemente.

Si la máquina está muy cerca de una pared o en espacio reducido, el acceso al depósito de agua para rellenar puede ser incómodo.

El peso del aparato puede dificultar moverlo para limpieza o mantenimiento.

Si no vacías el depósito de residuos de café (“puck bin”) regularmente, puede llenarse y causar fallos o bloqueos.

El flujo de agua caliente puede variar ligeramente entre preparaciones, afectando la consistencia del café.

El sistema thermoblock puede tardar en estabilizar temperatura si hay muchas variaciones de uso.

La presión nominal de 19 bares es teórica; en práctica puede no mantenerse siempre estable.

Posible formación de espuma excesiva o burbujas si el sistema no regula bien la presión o temperatura.

Si usas café muy fino con la molienda más densa, puede generarse un bloqueo o contrapresión excesiva.

Si usas café muy grueso, el espresso puede salir aguado o poco extractado.

No siempre se puede utilizar café ya molido (o pedirlo al mercado) sin que afecte el rendimiento.

En algunos casos, los sensores pueden fallar (nivel de agua, sensor depósito de granos, puertas mal cerradas).

Si la unidad de infusión no se extrae con facilidad, el mantenimiento se hace más tedioso.

Si la máquina no detecta correctamente el depósito de residuos, puede detenerse el funcionamiento.

Algunas piezas desmontables pueden perder ajuste con el tiempo (holguras en tapas, juntas).

Si el molinillo interno no es de la mejor calidad, puede generar calor excesivo al moler, deteriorando el grano.

Los residuos de café pueden quedar alojados en partes ocultas si el diseño no permite buen acceso.

Si el sistema de “standby” o reposo no es eficiente, podría seguir consumiendo energía innecesariamente.

El diseño estético (acabado negro, pulido) puede mostrar marcas, huellas o desgaste con el tiempo.

Si la máquina se descontinúa, conseguir repuestos puede volverse difícil a largo plazo.

Garantía limitada en componentes internos como bomba, molinillo, placas electrónicas.

Si hay fallos eléctricos en la electrónica, la reparación puede resultar costosa o inviable para el precio del aparato.

La calibración inicial de fábrica puede no estar óptima, por lo que tendrás que hacer ajustes manuales.

Al estar muy automatizada, si hay fallo en algún ciclo de limpieza o autolimpieza, toda la máquina puede quedar inutilizable temporalmente.

Comparada con máquinas de gama alta especializadas, puede quedarse corta en precisión, estabilidad térmica o refinamiento del café (control fino del perfil de extracción).