SANDISK SSD PLUS 2.5 Hasta 545 MB/s lectura 505 MB/s escritura SATA Negro

Te vamos a mostrar las principales razones, motivos y opiniones negativas sobre el/la SANDISK SSD PLUS 2.5 Hasta 545 MB/s lectura 505 MB/s escritura SATA Negro, todas las webs únicamente se centran en lo positivo, y eso no debería ser así. Aquí no vendemos, así que te decimos la verdad.

También repasaremos su ficha técnica, por si algún dato no lo tienes muy claro y quieres informarte adecuadamente.

duda

Razones, motivos y opiniones negativas para pensárselo... antes de comprarlo en:




  • Tasa de fallos relativamente alta: hay reportes de unidades que fallan completamente (no reconocidas en BIOS) después de poco tiempo de uso.

  • Rápida degradación con uso intensivo: bajo escenarios de escritura frecuente puede perder rendimiento con el tiempo.

  • Caídas drásticas de velocidad en el mundo real: algunos usuarios reportan transferencias que caen a unos pocos MB/s en uso prolongado.

  • Problemas de sectores defectuosos: usuarios han observado “bad sectors” que el firmware no logra gestionar correctamente.

  • Firmware defectuoso o inconsistente: ciertos firmware no manejan bien la gestión de errores o el re-mapeo interno.

  • Sensibilidad a picos eléctricos: denuncias de que la unidad es vulnerable ante picos de voltaje o conexión inestable.

  • Problemas de soldadura/componentes sueltos: algunos análisis señalan que los componentes en la placa pueden estar mal soldados o ser demasiado grandes, generando conexiones débiles.

  • Diseño de calidad media: uso de componentes más baratos para reducir costos.

  • Ausencia de DRAM (en muchos modelos): esto afecta el rendimiento en operaciones aleatorias y carga sostenida.

  • Rendimiento aleatorio (4K) bajo: especialmente en operaciones pequeñas, es mucho más lento que SSDs de gama media/alta.

  • Caídas de velocidad cuando la unidad está casi llena: a medida que el espacio libre disminuye, el rendimiento se deteriora.

  • No es ideal como unidad principal en sistemas exigentes: para tareas intensivas (edición de vídeo, máquinas virtuales, etc.) puede quedarse corto.

  • Calor excesivo bajo carga sostenida: puede elevar temperatura, lo que afecta la longevidad.

  • Limitaciones de interfaz SATA: al ser SATA, ya estás limitado frente a SSDs NVMe que ofrecen velocidades mucho mayores.

  • Rendimiento estándar “teórico” difícil de alcanzar: los valores de 545/505 MB/s muchas veces son picos en condiciones ideales.

  • Latencias mayores comparado con SSDs superiores: en respuestas pequeñas o consultas intensivas puede sentirse más lento.

  • Sin características avanzadas de caché dedicadas: menos eficiente para equilibrar cargas.

  • Pérdida de datos súbita: en casos de fallo total, los datos pueden no ser recuperables fácilmente.

  • Garantía limitada: muchos usuarios manifiestan que los fallos aparecen justo al vencerse la garantía.

  • Dificultades en el proceso de RMA o reemplazo: algunos compradores han reportado problemas al hacer valer la garantía o que los procedimientos son engorrosos.

  • Ruidos o vibraciones inexistentes (positivo) pero cero tolerancia a fallas mecánicas: aunque no tiene partes móviles, eso no lo hace inmune a fallos eléctricos.

  • Posible incompatibilidad con algunos BIOS antiguos: puede que no sea reconocido en placas base viejas o con controladoras especiales.

  • Limitada capacidad de actualización futura (si tu sistema evoluciona hacia NVMe): te quedarás “atrapado” por SATA.

  • No incluye accesorios (tornillos, adaptadores internos) en algunos paquetes: usuario debe proveerse de ellos.

  • Carcasa plástica simple: poca protección frente a golpes o vibraciones fuertes.

  • Poco margen para over-provisioning por el usuario: espacio extra reservado para desgaste limitado.

  • Rendimiento degradado en ambientes extremos (temperaturas bajas o muy altas).

  • Falta de funciones como encriptación de hardware avanzada: no es tan completa desde el punto de vista de funciones extra.

  • Consumo energético relativamente bajo, pero no óptimo: hay SSDs más eficientes en consumo standby.

  • Falta de capacidad “burst” excepcional: no es ideal para cargas cortas ultra intensivas.

  • Impacto del TRIM y gestión interna con uso severo: en uso continuado puede no mantener su mejor performance si el firmware no administra bien el mantenimiento.

  • Limitaciones de vida útil (TBW bajos en comparación con SSDs de gama media/alta).

  • Riesgo de “desgaste prematuro” si se usa para sistemas que constantemente escriben (logging, bases de datos, etc.).

  • Rendimiento degradado con muchos ciclos de escritura: con muchos ciclos pierde rendimiento más rápido.

  • Escasa tolerancia a apagones abruptos: en cortes de energía inesperados puede corromper datos o “brickear”.

  • Poca visibilidad de estado real: algunas herramientas de monitoreo no informan bien su desgaste.

  • Alertas SMART no siempre confiables: puede que muestre “salud normal” aun cuando hay problemas internos.

  • No ideal como unidad de respaldo permanente (confiabilidad cuestionable según casos).

  • Mala reputación en foros técnicos: usuarios especializados recomiendan evitarlo para datos críticos.

  • Rendimiento inconsistente entre unidades / lotes: una unidad puede funcionar bien, otra de la misma serie puede fallar pronto.

  • Fallas intermitentes: algunas unidades fallan parcialmente, con errores aleatorios, antes de morir completamente.

  • Limitada capacidad de escritura sostenida elevada (cuando trabajas con archivos grandes).

  • Inestabilidad en entornos RAID/arrays complejos: algunos reportes lo han usado en RAID con fallos inesperados.

  • Ausencia de funciones como “cache SLC dinámico” robusto: no tan optimizado como SSDs más avanzados.

  • No es “future proof”: frente a los avances (NVMe, PCIe 4.0/5.0) quedará como opción básica.

  • Valor de reventa bajo debido a reputación de fallos y competencia más moderna.

  • Posible fiabilidad menor en versiones de alta capacidad (ej. modelo de 2 TB reportado con fallos en masa).

  • Poco margen para actualizaciones de firmware útiles: si el fabricante no lanza mejoras, el usuario queda sin recursos.

  • Durante ciertos usos, la unidad puede saturarse y entrar en “modo degradado” con caídas bruscas de desempeño.

  • Riesgo de pérdida total de datos sin previo aviso: muchos usuarios reportan que la unidad “muere” de repente sin señales previas claras.

  • duda

    Vamos ahora a ver la ficha técnica de este estupend@ Disco duro SSD interno 500GB – SANDISK SSD PLUS 2.5″ Hasta 545 MB/s lectura 505 MB/s escritura SATA Negro

    Características generales
    Color (estandarizado)Negro.
    Manufacturer Part Number (MPN)SDSSDA-500G-G28.
    Color (por fabricante)Negro.
    Dimensiones / Peso10.05 cm x 6.99 cm x 0.7 cm / 0.059 kg.
    Peso embalado0.69 kg
    Circunferencia45.4 cm.
    Tamaño embalaje (An/Al/F)(cm)12.7 cm / 17.78 cm / 1.11 cm.
    Profundidad del embalaje1.11 cm
    Alto del embalaje17.78 cm
    Ancho del embalaje12.7 cm
    Tipo de dispositivoDisco duro SSD interno.
    ContenidoDisco duro interno SSD.
    Peso (según el fabricante)0.059 kg.
    Peso0.033 kg
    Profundidad0.7 cm
    Altura6.99 cm
    Anchura10.05 cm
    SerieSSD PLUS.
    Equipo
    Caract. especialesIntegra el almacenamiento en caché SLC.
    Número discos duros1.
    Wi-FiNo.
    Software incluidoCon software Acronis® True Image™.
    Caracteristicas técnicas
    Tipo de disco duroSSD.
    Interfaz de disco duroSATA.
    Velocidad de escritura505 MB/s
    ConexionesSATA.
    Velocidad de lectura545 MB/s
    Factor de forma (Pulgadas)2.5 «
    Sistemas operativos compatiblesPC: Windows® 11, Windows® 10, Windows® 8.1, Windows® 7.
    Vel. de transferencia545MB/s.
    Capacidad memoria500 GB
    Tipo de unidadInterno.
    Update policy
    Dispositivos compatiblesOrdenadores portátiles.